La vida de Vincent Van Gogh fue sin duda muy interesante, y lo que respecta a su formación como pintor lo fue aún más. Un artista incomprendido en su época que, solo pudo vender un cuadro por su cuenta, pero que después de su muerte, se le reconocido como el gran artista que fue, valorando sus cuadros en cientos de millones de dólares. Sus trazos son tan codiciados que hasta la fecha, es el artista con más obras robadas y extraviadas de toda nuestra historia.

Nacido el 30 de marzo de 1853, en Holanda, Vincent creció bajo el seno de una familia religiosa, aunque empezó a interesase por el arte gracias a su tío, quien inicialmente le ayudo a conseguir un empleo como comerciante de arte, sin embargo, sus valores y gustos artísticos no serían negociables, siendo despedido por intentar imponerlos por sobre las ventas.

Cuando regresa a casa, retoma su vínculo con la fe y sus creencias, decide estudiar pues, teología y posteriormente empiezas otro trabajo como misionero en una comunidad minera, específicamente de carbón, en donde también reanuda su interese por el arte. Años siguientes, y luego de rencontrarse con una de sus pasiones, Van Gogh entró en la academia Royale des Beaux-Arts para mejorar sus dotes artístico, a pesar de que siempre fue autodidacta.

Aun cuando Van Gogh empezó a pintar aproximadamente a los 26 años de edad, este gran artista en solo 10 años llegó a terminar unos 900 cuadros, y hacer unos 1100 dibujos, pues su temprana muerte a los 37 años, luego de que este supuestamente se suicidara al  dispararse con un arma de fuego el 29 de julio de 1890 en Francia, pondría fin a su brillante carrera.

Loving Vicent, intenta contar precisamente eso, su biografía y lo más curioso de su vida, imitando el estilo impresionista de este importantísimo pintor. La película está escrita y dirigida por Dorota Kobiela y Hugh Welchman, fue llevada a cabo por aproximadamente 120 personas, pintando 65.000 cuadros iluminados con óleo, en lienzos de 70cm x 51 cm, cada uno fotografiado con cautela a una velocidad de 6 a 10 segundos para recrear varios movimientos, luego de haber sido filmada con actores reales.

Robert Gulaczyk como Vincent van Gogh

Douglas Booth como Armand Roulin

Jerome Flynn como el Dr. Gachet

Saoirse Ronan como Marguerite Gachet

Helen McCrory como Louise Chevalier

Chris O’Dowd como el cartero Roulin

John Sessions como Père Tanguy

Eleanor Tomlinson como Adeline Ravoux

Aidan Turner como Barquero

La idea inicial de Dorota no era realizar una película, sino más bien un corto en donde se pretendía contar la larga historia de Van Gogh, aunque pronto abandonaría esa idea, pues señaló “Me di cuenta de que no podía pintarlo todo yo sola, me llevaría unos 21 años, según mis cálculos. Así que me hice la directora”, uniéndose más tarde al proyecto su pareja personal Hugh Welchman.

Loving Vincent es en efecto una obra artística cinematográfica que, ha llamado mucho la atención, una obra a la cual se le ha dedicado más de 5 años hasta poder terminar. A pesar de que su argumento es muy sencillo; contar su vida, la creatividad surgió de parte de los escritores al intentar explicar los motivos que decidieron ponerle fin a su propia vida.

¿Dónde estaba la pistola? ¿Por qué no hubo nota de suicidio, y la última carta que escribió antes de morir, a su hermano, estaba llena de optimismo? ¿Por qué acabar de hacer un pedido de pinturas? ¿Por qué, sobre todo, se disparó en un lugar tan improbable como el estómago, lo que provocó una agonía dolorosa de 29 horas?, dudas que surgieron al escribir el final de la misma, no obstante, un hecho que jamás podremos averiguar a ciencia cierta.